Los restaurantes que ya no están

La cara gastronómica de Lima ha cambiado y sin duda para mejor. Nuestra comida vive un gran momento y parece que lo mejor está por venir. Pero no es fácil olvidar algunos restaurantes  que marcaron época en Lima o simplemente en mi memoria.

Carlin.6En los años setenta, cuando nadie hablaba de chefs y todos los platos eran redondos, estaban el Firenze de la avenida Pardo adonde termino trabajando Víctor el mayordomo de mi abuela; Carlín que destacaba por la originalidad y ambiente (châteaubriand con salsa bearnesa) o el Saint Tropez y su lomo stroganoff; Roxy donde llegué a comer sus famosos Spaguetti a lo Alfredo (hace poco de reabrieron después de muchos años); Hunter’s Grill en el centro comercial Gálax; Mauricio, típico restaurante de comida internacional formalón en el centro de Lima, al que alguna vez fui con mis abuelos. Me sentía adultísimo pidiendo «Pepper Steak”.

No muy lejos  de allí: el Sky Room del Crillón donde conocí el delicioso soufflé grand marnier heladosky room crillón y en el jirón Ancash el señorial Las  Trece Monedas.

En Pescados no había muchas opciones. En Todo Fresco tenían platos marinos lo que resultaba inusual en una Lima que miraba el cebiche por debajo del hombro.

En los años ochenta apareció el Síbaris (y murió y resucitó con otra cara y volvió a morir) con una cocina española clásica de buena factura con toques internacionales que incluían lasagna de camarones. Convirtieron en tradición de los jueves uno de los grandes manjares de occidente: el cochinillo a la segoviana, tradición seguida hoy por La Eñe. El Pabellón de Caza también marcó época.

En los noventa destacó La Cofradía de los Desmaison, Vecchia Roma de Settembrini y Bonaparte en San Isidro.  Hoy, con la misma marca,  Enrique Blondet ha abierto una excelente tienda gourmet. En franceses teníamos Le Bistrot de mes Fils y La Reserve de Jean Patrick,  tal vez el último gran restaurante francés antes de la aparición de Hervé. Otro que me gustaba, uno más sencillo:  La Crêpe Bretonne. Tenían un curiosos postre dulce/salado: kouign-amann.

Algunos hoteles tenían buenos restaurantes como el Ambrosía del Park Plaza o, antes, el buffet en La Azotea de el César’s.

Laomida peruana todavía no tomaba fuerza. Algunos experimentos fueron la génesis del boom: El Comensal : enclavado en el Olivar de San Isidro introdujo la cocina «novoandina», Pantagruel: Una continuación del anterior. Ofrecían un rico chicharrón de cuy y quinoto. Recuerdo una contundente “Olla Huacachina”.

logo el ranchoOtros resturantes: en carnes y pollos se extraña El Cortijo, el Pío Pío (primer piso de lo que hoy es el Bohemia, donde también estuvo el primer Rodizio) adonde compré mi primer pollo a la brasa con propina de mi abuelo y El Rancho que ha cerrado el año pasado aunque no pierdo la esperanza de que reabara en otro lugar (esas recetas no se pueden perder). En los setenta El Burrito introdujo los pollos broaster. El Rincón Gaucho sigue pero recurdo mucho su locoal en el parque Salazar con vista a la concha acústica.

En comida italiana, las “más pizzas ricas de Lima” del Beverly Inn (la de cebolla blanca o la atómica), La Pizzería en la Av. Diagonal que era mucho más que eso: punto de encuentro. (risotto con ossobuco) y la Pizzeria Italia en la calle José Olaya al costado del Champagnat. Entre las últimas pérdidas Da Luciana, Divina Commedia en Conquistadores, Mare & Monti en Barranco,  San Felice el primer restaurante del que Rafael Piqueras fue chef principal en Lima y  Santa Lucía en la calle Atahualpa.  En República de Panamá había una buena tienda-restaurante de pastas: Spaghettilandia.

En comida rápida estuvo primero el Mac Tambo (en Manuel Bañón y en Benavides) y después el Bon Beef en Camino Real.

 

Cafeterias, heladerías y delicatessen
Davory Uno de mis favoritos de siempre: una butifarra con salsa golf irrepetible, el sundae con fudge, torta de chocolate combinada con helado “de máquina”, cremoladas y los alfajores de maicena que le encantaban a mi hermana Carmen. Los primeros donuts en Hampton’s Doughnuts en Conquistadores.
Las butifarras del Cine Country a cargo, en los últimos años, de un italiano de Bari;
Aurelia precursores de las pastas listas para hornear y donde había un buena selección de embutidos y sánguches; Eclairs era la Tiendecita Blanca pobre (en la calle La Mar) donde se podían comer unas butifarras en pan de yema y milhojas de fresas y chantilly. Un clásico fue la Fuente de Soda Todos
En Miguel Dasso apareció el D’Onofrio, tal vez el precursor de los cafés que hoy encontramos por doquier. Al costado del cine El Pacífico estaban los helados del Montebianco.

El Oh qué Bueno marcó época con sus helados «Zambitos». Después Alpha («el de fresas con crema, por favor») y Lamborghini original (el helado de cocada mi preferido). En los setenta la Dulcería Capricho.

En Atahualpa llegando a Pardo funcionaba la salchichería Huaychulo donde vendía un jamón crudo delicioso y la Salchichería Suiza de Miguel Dasso.

Para que resurjan todos estos nombres he tenido que hacer un escaneo en mi memoria y también me he valido unas guías que publicó Mariano Valderrama a comienzos de los noventa que aún guardo.

Y ustedes ¿ de qué lugar que ya nos está guarden grandes recuerdos?

17 Comments

  1. CALRO QUE SI, NO SE OLVIDEN DE LAS 13 MONEDAS, EAU VIVE EN EL CENTRO DE LIMA, EL TOMBO DE ORO, EN MIRAFLORES EL ROXI Y EL FIRENZE, LA PIZZERIA DE DIAGONAL CUANDO SUS MEJORES EPOCAS.
    EL CHALET SUIZO EN LA COLMENA Y TANTOS MAS QUE MARCARON EPOCA.

  2. En el Rincón Gaucho siempre que iba a hacer mi pedido el mozo perdía la paciencia pues demoraba mucho en decidir entre Bife de Chorizo, Lomo y Cuadril.

  3. MUY BUENOS RECUERDOS CARLOS…..LAS MEJORES PIZZAS LAS COMI EN LA PIZZERIA….ERA PUNTO FIJO DE REUNION CON MI FAMILIA…..LAS CONCHITAS A LA PARMESANA O SU LOMO A LA PIMIENTA, ESPECTACULARES……RECUERDO DE MI NIÑEZ HABER RECALADO MUCHAS VECES EN EL HAITI A COMERME UN HOT DOG CON CHUCRUT Y MI CLASICO VASO DE MILO CON LECHE (EN VASO DE MILKSHAKE)…ESTO ERA SIEMPRE ACOMPAÑADO DE MI PADRE QUE ME RECOGIA DE MIS CLASES DE VIOLIN EN EL HANS CHRISTIAN ANDERSEN QUE ESTABA EN PARDO…….UFFFFF, MUCHOS RECUERDOS
    UN SALUDO A LA DISTANCIA CARLOS

  4. Muy buena recopilación recordarística. En cuanto a las hamburguesas, ya que mencionas al Bon Beef, yo traigo a los otros dos que formaron mi triunvirato hamburguesil: Luciano’s Burger y el Bar B.Q.

    En el Ovalo Gutiérrez también estuvo La Campana, lugar de consumo rápido de tipo familiar. Allí habían hamburguesas, salchipapas (con salsas óptimas) y vendían obleas (con manjarblanco).

  5. Me acuerdo haber ido temprano a La Campana y haber esperado que abran para comprar las benditas obleas colombianas que eran toda una novedad en esa Lima en blanco y negro.

  6. Saludos desde Puerto Rico … muchas gracias por traer a nuestra memoria recuerdos imborrables … tambien le agradezco por mencionar nuestro negocio … soy la hija mayor de Nino, el dueno y fundador de la Salchicheria Huaychulo … donde tuve la grata experiencia de trabajar desde chiquita … a fines de los 70, el negocio cerro pero me alegra que aun viva en la memoria de quienes degustaron sus excelentes productos … una vez mas, gracias!

  7. Se acuerdan del Indianapolis (Av. Arequipa llegando a Largo), El Solari (Pardo), en fast food también estaba el Jumpy (ahí nomás del Bon Beef)… también habían buenas hamburguesas en el Pops (hoy hay un grifo Primax en Primavera llagando el puente de la Panamericana Sur), El Sandunga (Emilio Cavenecia) y el Mecano (tremendo local en Camino Real)…. recuerdos!!!

  8. Vivo casi 30 anos en USA, pero siempre regreso a mi pais a comer ( como por ejemplo este Disciembre 12). No nos podemos olvidfar del Ebony en Las Begonias. Restaurant elegante, estupenda comida y servicio como solamente en el Peru encuentras. En otro orden de cosas el piano bar q’ estaba en La Pardo junto al Firenze. Extraordinarios Martinis al pie del piano.gacgaj

  9. Vivo ya 42 aňos en Dubrovnik, Croacia, un mundo muy diferente al de Lima pero que decir, como olvidar las inigualables y deliciosas empanadas y butifarras del «Davory» en san isidro… era mi barrio, las hamburguesas de «El Tambo», el «bar B&Q», el «Haiti» en miraflores, el «Rancho», El «Cortijo», «El Pico de Oro», «Todo Fresco»… y naturalmente el «Hampton´s Dougnuts» con sus tambien buenisimas empanaditas y mini pizzas… vaya buenos tiempos… hoy la onda esta en los nuevos restaurantes de comida criolla… ademas exelentes, vayan a «La Panca», al «Rasson» o comer las deliciosas costillas en el «Tony Roma´s»… por ahi estare el febrero. Un saludo a los gurmanes de los ’60 y ’70…

  10. La Querencia en la Av. Brasil, servía buenisimas carnes, y estaba también el Sr. Hans en la Av. Marina, cuando todo eso era un descampado. No estaba ni la PUC. También mencionar las primeras hamburgusas en carretilla en distritos como Miraflores y luego las pizzas en carretillas también, en Dasso, Parque Kennedy etc.

  11. La ballena era un restaurant ubicado x el stadio nacional tenia forma d ballena con unas pinturas d los personajes d cuentos habian peceras a su alrededor era un lugar hogareño y muy calido me nkntaria q sikiera alguien tenga una foto d ese lugar x q solo lo tengo en mi recuerdo

  12. Te falto ,el Marco Antonio y mi parrillada favorita de niño La Querencia al final de la av Brasil , el pollon en la av del ejército al costado del grifo una super salchipapas

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